Está Adán muerto de aburrimiento en el Paraíso, de un lado para otro,cuando se le aparece Dios y va Adán y le suelta:
– Mira, Padre, esto del Paraíso está muy bien, eso de comer sin pegar golpe y todo eso, todo juerga y cachondeo, todos los animalitos… pero me aburro mucho, y he pensado que podrías crear a alguien más que me acompañe…
Le responde Dios:
– Hijo, llevo algún tiempo pensando en crear a la mujer. Será el ser perfecto: el ser más inteligente, afectuoso, hermoso, sincero, sensible y virtuoso que exista. Siempre te apoyará, hagas lo que hagas, y sabrá ayudarte en cualquier ocasión; nunca te molestará, y siempre intentará apoyarte; en resumen, será el ser perfecto. Pero si lo quieres, deberás darme un brazo, una pierna, la mitad de tu cerebro, un pulmón, medio hígado, un riñón y medio corazón para que pueda crearla a partir de tí.
Se queda Adán pensativo y responde al rato:
– Y… ¿qué me darías por una costilla?